La parafina tiene infinidad de usos en la estética y está presente en muchos productos de belleza, como cremas rejuvenecedoras o reafirmantes.
Sirve para hidratar profundamente la piel disminuyendo la sequedad de la dermis y es efectiva en el tratamiento de contracturas, dolor muscular, tendinitis y artrosis.
Debido a sus propiedades hidratantes es aconsejable su uso en pieles secas y que pueden presentar grietas o escamas. Aporta firmeza y suavidad a la piel, muy indicada para pies y manos, mejora la circulación de la sangre debido al calor.
Cuando la parafina está líquida, se extiende por la zona a tratar formando una capa aislante que evita que se pierda humedad e hidrata la piel.
El proceso de aplicación de este producto sería el siguiente, primero se derrite a una temperatura entre 45-55 grados, una vez líquida se sumergen los pies o manos en el producto o se puede aplicar con una brocha. Una vez seca cubrimos la zona con toallas o papel aislante y esperamos 15 minutos, a continuación retiramos la parafina.
Una vez finalizado el tratamiento tendremos una piel con mejor color y aspecto, más hidratada y más suave.
El uso del calentador de parafina mantiene el calor en el interior debido a su termostato, alargando el uso del producto.
También se utiliza para tratamientos de adelgazamiento, ayuda a quemar la grasa mediante el calor, suele aplicarse con mantas y después se aplica algún producto frío.
En nuestro catálogo encontrarás diversas opciones de calentador parafina.
